El Papa Benedicto XVI, al inicio de su mensaje para la cuaresma 2013, dice
«La celebración de la Cuaresma, en el marco del Año de la fe, nos ofrece una
ocasión preciosa para meditar sobre la relación entre fe y caridad: entre creer
en Dios, el Dios de Jesucristo, y el amor, que es fruto de la acción del
Espíritu Santo y nos guía por un camino de entrega a Dios y a los
demás.»